"Para producir belleza hay que padecer dolor"
Charlie Parker
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Cortázar: No, yo no lo conocí personalmente, aunque sí estéticamente, porque me tocó vivir en el momento en que Charlie Parker renovó completamente la estética del jazz y después de un período en que nadie creía y la gente estaba desconcertada por un sistema de sonidos que no tenía nada que ver con lo habitual, se dieron cuenta de que allí había un genio de la música.
7 comentarios:
el jazz es la quemazón de mis yemas, la musa que se escapa.
qué gran conjunción
dolorcortázarparkerbellezageniosonido
Si bien -en ocasiones- la belleza puede doler, su manifestación más honda nos duele siempre...
Besos
(Y qué buen libro El perseguidor, de Cortázar. Me lo recordaste...)
Me costó sangre, sudor y lágrimas, a mis diecisiete años, dar el salto de Coleman Hawkins a Charlie Parker. El de Charlie Parker a Coltrane fue más digerible; y el de este a Ornette Coleman un paso. Hoy, no entiendo la música sin ninguno de ellos.
Entiendo yo poco de algunos tipos de Jazz.
Ya sé, mírenme como un bicho raro, completamente out de lo más cool.
Les aseguro, sin embargo, que un alto porcentaje de los que dicen que flipan con esta música (pasa lo mismo con el más puro flamenco, otra zona de mis desconocimientos), tienen poquísima idea de lo que están escuchando.
En fin, es lunes.
Besos.
bueno, yo puse esta frase porque me vino a la cabeza una discusión que mantuvimos unas entradas más abajo sobre escribir y la tristeza...
exactamente como a usté, don micro, a mí el jazz se me hace difícil como el flamenco y como la poesía, con sus tonadas y códigos, que, supongo, son un verdadero deleite cuando consigues hacer el oído a su lenguaje
y nunca se acaban
abrazos
Claro, Aroa. Yo no puedo pasar en esos ámbitos del "me gusta" y el "no me gusta", pero de ahí a entender en profundidad la complejidad de esa música ha yun tramo enorme.
Un besote.
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